Como un chico que empieza a dar los primeros pasos, todo nos cuesta el doble. Hace fechas que digo que los partidos hay que buscarlos, y no cerrarlos. Un partido se cierra, cuando está por terminar, cuando el rival es superior, y está por terminar el cotejo… es decir, cuándo está por concluir, y no cuando marcamos una leve diferencia.

Habrá que pensar… hasta dónde vamos a poder soportar esta decisión que, en general, nos conduce a la derrota o al empate.

Si bien Gallego va encontrando el funcionamiento y admite con “delay” algunos errores, me preocupa que demore tanto. Espero que no repitamos la equivocación de, ante la ausencia de Acevedo, incluir a Godoy o a Pusineri que está sólo para un tiempo. La solución es Vittor.

¿Núñez debe seguir jugando de volante? No tiene despliegue ni marca. Porque, en vez de improvisar, no lo dejamos a Mancuello.

Son algunas cosas. Agregaría insistir en el trabajo con los relevos.

Vamos bien, pero si sabemos que hay un desacople o determinaciones que no funcionan, no las repitamos. Gallego debe aprovechar su sapiencia para marcar otras cosas. Por ejemplo, el sabio consejo passareliano, de llegar de atrás en los córners, para sorprender y convertir. Como hacía Passarella, como hizo Galeano.

boneco_rojo@hotmail.com

1 comentarios
  1. Capote 21 de octubre de 2009, 8:34  

    Estimado Boneco, hace mucho que no aparezco por estos lares, pero como es costumbre concuerdo con sus pensares. Todo nos cuesta el doble, y los delay son como déjà vú. Este equipo hasta ahora dio lo que no esperábamos y espero que lo que esperamos no se cumpla. Queremos soñar y no parar de sorprendernos, pensar que todo puede ser. Mas allá de los nombres y los hombres me queda un pensamiento prestado: “el futuro podrá ser incierto, pero no tiene porque ser obligatoriamente desdichado”.